1. Abraham Lincoln
Lincoln intentó muchas ocupaciones como un hombre joven, incluyendo la compra de un almacén general en New Salem, Illinois, en 1832. Él y su compañero comenzaron a comprar inventarios otras tiendas a crédito, pero sus propias ventas eran bajas. A medida que las deudas de la tienda aumentaban, Lincoln vendió su parte, pero cuando su compañero murió, el futuro presidente se hizo responsable de $1,000 dólares en pagos atrasados. Lincoln no tenía leyes modernas de bancarrota para protegerlo, así que cuando sus acreedores lo llevaron a los tribunales, perdió sus dos activos restantes: un caballo y un equipo de topografía. Eso no fue suficiente para pagar su factura, y Lincoln continuó pagando sus deudas hasta bien entrados los1840s.
2. Henry Ford
La empresa se declaró en bancarrota en 1901 y se reorganizó en Henry Ford Company más adelante ese año. Ford finalmente salió de ese grupo y consiguió poner las cosas en orden en 1903, cuando fundó la Ford Motor Company. Las cosas no salieron tan mal para la compañía después de que él se fue, tampoco; cambió su nombre en uno que podría encontrar un poco más reconocible: la Cadillac Automobile Company. Ford no era el único magnate del automóvil que supo cómo se sentía la bancarrota, el fundador de General Motors, William Crapo Durant, recibió un golpe masivo durante la Gran Depresión que vio caer su fortuna de 120 millones de dólares a la bancarrota. Pasó sus últimos años dirigiendo una bolera en Flint, Michigan.
3. Walt Disney
Su nombre puede ser una marca conocida hoy, pero a principios de su carrera, Disney era sólo un cineasta con muchas deudas. En 1922 comenzó su primera compañía cinematográfica con un socio en Kansas City. Los dos hombres compraron una cámara usada y hicieron películas cortas publicitarias y caricaturas bajo el nombre de estudio Laugh-O-Gram. Disney incluso firmó un acuerdo con una compañía de Nueva York para distribuir las películas que estaba produciendo. Ese arreglo no funcionó tan bien, pues el distribuidor quedó mal con el estudio. Sin el dinero del distribuidor, Disney no pudo cubrir su sobrecarga, y su estudio fue a la quiebra en 1923. Luego dejó Kansas City para ir a Hollywood, y después de una serie de creaciones cada vez más exitosas, Disney debutó un nuevo personaje llamado Mickey Mouse en 1928.
4. Milton Hershey
A pesar de que nunca tuvo una educación formal, Hershey pasó cuatro años aprendiendo en una tienda de dulces antes de salir por su cuenta en Filadelfia en 1876. Seis años más tarde, su tienda fracasó, al igual que un intento subsiguiente de vender dulces en Nueva York. Hershey regresó a su casa en Lancaster, Pensilvania, donde fue pionero en el uso de leche fresca en producciones de caramelo y fundó la exitosa Lancaster Caramel Company.
5. Burt Reynolds
Burt Reynolds fue una de las estrellas más grandes de Hollywood de los años 70. Por desgracia, gastó dinero como si su carrera nunca llegara a su fin. Poseía mansiones en ambas costas, un helicóptero y un lujoso rancho en Florida. Poco a poco, su situación financiera se volvió más severa cuando tomó malas decisiones en su carrera y tuvo un costoso divorcio de Loni Anderson. En 1996, el bandido debía $10 millones de dólares a sus acreedores, Reynolds declaró la bancarrota del capítulo 11, de la cual emergió en 1998.
